Catorce hombres serán enjuiciados, entre los que destaca el exmandatario Blaise Compaoré. (ESPECIAL)
El juicio por el asesinato en 1987 de Thomas Sankara, el carismático expresidente burkinés conocido como el "Che Guevara" de África, empezará este lunes en un tribunal militar de Uagadugú, la capital de Burkina Faso.
Catorce hombres serán enjuiciados, entre los que destaca el expresidente Blaise Compaoré, quien sucedió a Sankara en la jefatura del Estado.
Sin embargo, Compaoré, de 70 años, no asistirá al juicio sobre el magnicidio, según informaron el pasado viernes sus abogados, quienes alegaron que su cliente goza de "inmunidad como antiguo jefe de Estado", entre otros argumentos.
El pasado 13 de abril, la Justicia de Burkina Faso acusó a Compaoré de "ataque a la seguridad del Estado", "complicidad de asesinato" y "ocultación de cadáveres" en relación con el asesinato de Sankara, si bien él niega los cargos.
Junto a él fueron acusadas también otras trece personas, entre ellas Gilbert Diendéré, jefe del Estado Mayor de Compaoré y de su guardia presidencial, quien lideró el intento fallido de golpe de Estado en septiembre de 2015.
Sankara fue asesinado el 15 de octubre de 1987, a los 37 años, junto a doce de sus acólitos después de que un comando golpista, liderado por Compaoré, asaltara su despacho.
El joven presidente, que llegó al poder en 1983 en un golpe de Estado organizado por el propio Compaoré, había lanzado un programa radical de reformas sociales y económicas.
Sankara se veía a sí mismo como un panafricanista y un revolucionario, inspirado por figuras como el entonces presidente de Cuba, Fidel Castro, o el guerrillero y político argentino nacionalizado cubano Ernesto "Che" Guevara.
Cambió también el nombre del país, llamado entonces República del Alto Volta (designación colonial francesa), por Burkina Faso, que significa en lengua mossi "patria de los hombres íntegros".
Compaoré, por su parte, dirigió el país hasta finales de octubre de 2014, cuando fue derrocado tras las revueltas civiles acaecidas cuando intentó modificar la Constitución con la intención de mantenerse más tiempo en el poder.
El expresidente burkinés se exilió en Costa de Marfil y sobre él pesaba una orden de arresto internacional desde diciembre de 2015 que, sin embargo, fue anulada por un tribunal burkinés en abril de 2016.
Con la salida de Compaoré, se desbloqueó la investigación por el asesinado de Sankara.
La indagación sobre dicho asesinato no ha prosperado hasta ahora, a pesar de que el Gobierno de transición formado tras la caída de Compaoré autorizó la exhumación del cadáver del exmandatario para realizar pruebas de ADN, que resultaron inconcluyentes.
Sin embargo, los expertos concluyeron que Sankara recibió varios disparos, algo que concuerda con el testimonio de los testigos y que dio esperanzas de que pudiera celebrarse el juicio.
Nos parece bien si otros viven de otra manera pero nosotras hemos elegido vivir a nuestra manera". Thomas Sankara pic.twitter.com/Aj3sIE8iJz
— Le Sankaractivisme (@sankaractivist) October 3, 2021